Daniel del Toro

Mi papel en FITUR 2025 como dinamizador de “Andalucía Crush”

Ya sabéis que, cada vez que tengo ocasión, me encanta pasarme por la Feria Internacional del Turismo, más conocida como FITUR. Este año, además, he tenido el honor de ser el dinamizador del espacio de showcooking “Andalucía Crush”, un rincón que ha sido un auténtico festín para los sentidos y en el que los sabores de nuestra tierra se han mezclado con historias y tradiciones.

En “Andalucía Crush” no solo se ha cocinado, sino que se ha contado la historia de cada pueblo que ha participado a través de sus productos más emblemáticos. Desde aceites de las provincias de Jaén y Córdoba que parecen oro líquido hasta quesos, como los de Zuheros o Cabra (Córdoba), que harían llorar de emoción a cualquier amante quesero. Mi papel consistió en darle ritmo, chispa y un toque de humor a cada showcooking y degustación. Porque, ¿qué es un buen plato sin una buena historia (y unas risas) que lo acompañen?

daniel-del-toro-fitur-andalucia crush2

Un festín de sabores y tradiciones andaluzas

Cada chef, cada productor y cada representante local pusieron sobre la mesa ingredientes, pasiones, anécdotas y ese orgullo andaluz que se siente en cada bocado. Vimos desde reinterpretaciones modernas de recetas tradicionales hasta combinaciones que, sí, parecían una locura al principio, pero que al probarlas solo podíamos pensar: “¡Esto es un crush gastronómico en toda regla!”.

Además, tuvimos la suerte de contar con propuestas muy variadas: showcookings organizados por el Ayuntamiento de Torremolinos (Málaga) o el de Córdoba, desayunos y brunchs de Vejer de la Frontera (Cádiz), catas de aceite de Baena (Córdoba), degustaciones de quesos artesanos de Zuheros (Córdoba), o una maridaje de vino naranja del Condado de Huelva con chocolate negro. Y no puedo dejar de mencionar la jornada de innovación y start-ups o el viaje de sabores de la provincia de Sevilla, que demostraron que la gastronomía andaluza no solo mira al pasado para reencontrase con sus raíces, sino que también apuesta por el futuro. La mayor recompensa fue encontrar entre los asistentes caras de sorpresa, “mmm” espontáneos y miradas que decían “quiero más” tras probar productos y platos de Andalucía. Y, por supuesto, no faltaron selfies con los platos más instagrameables.

No hay duda de que, un año más, FITUR 2025 es un escaparate brutal para demostrar que Andalucía no solo se visita, también se saborea. Y yo termino feliz de haber puesto mi granito de sal (y de pimienta) para que esa experiencia fuera inolvidable. ¡Gracias a todos los que os acercasteis, probasteis, reísteis y, sobre todo, os dejasteis conquistar por el crush más delicioso del año!

Compartir en: