Si hay un evento que intento no perderme año tras año es la feria HIP (Horeca Professional Expo), que se celebró en IFEMA Madrid del 10 al 12 de marzo de 2025. Siempre es un punto de encuentro para descubrir tendencias, reencontrarme con amigos del sector y, sobre todo, aprender e inspirarme.
Este año, tuve la suerte de participar de la mano de Juanito Baker, una marca que ha revolucionado la panadería artesanal para demostrar algo que siempre defiendo en cocina: el pan no es solo un acompañamiento, es un ingrediente clave.
Cuando el pan marca la diferencia: tradición y creatividad en cada bocado
En Juanito Baker son unos verdaderos maestros del pan. Su pasión por la panadería se nota en cada pieza que elaboran, desde un brioche perfecto hasta panes integrales o una hogaza de masa madre. En nuestro showcooking, quisimos resaltar cómo elegir el pan adecuado puede elevar cualquier plato a un nivel superior, desde un simple montadito hasta una hamburguesa. Cada tipo de pan aporta una textura y sabor únicos, capaces de transformar una receta sencilla en un plato memorable.
De la teoría a la práctica: ¡a cocinar!
Con el horno a punto y los ingredientes listos, me puse manos a la obra y preparé recetas en las que el pan era el protagonista: platos deliciosos elaborados con panes creados para la hostelería que arrancaron más de un “¡wow!” entre el público.
Porque sí, el pan bien elegido no solo acompaña, sino que transforma la experiencia gastronómica. Y en hostelería, los pequeños detalles siempre marcan la diferencia.



Un evento para aprender y compartir conocimientos
Lo mejor de HIP es que además de cocinar, compartimos conocimiento y nos inspiramos mutuamente. Ver la reacción del público, responder preguntas y debatir sobre cómo la panadería artesanal puede marcar la diferencia en la hostelería es lo que hizo que este evento fuera especial. Siempre es un placer formar parte de este tipo de encuentros, rodeado de grandes profesionales y de unos asistentes que disfrutan tanto como nosotros.
La hostelería está en constante evolución, y es nuestra responsabilidad como profesionales estar al día con las necesidades y gustos cambiantes del público. Ya sea a través de la incorporación de ingredientes locales, la adopción de nuevas tecnologías de cocina o la creación de experiencias culinarias únicas. El futuro de la gastronomía depende de nuestra capacidad para innovar sin perder de vista nuestras raíces y tradiciones. Y, después de esta edición, queda claro: el pan bien hecho tiene mucho que decir en la cocina.
¡Nos vemos en la próxima feria! Y, recuerda: ¡que no falte el buen pan! 🥖